Rosa de las Heras es una caja de sorpresas. Su tesis acaba de recibir el Premio Extraordinario de Doctorado por su aportación a la pedagogía del Flamenco. Pero además de Doctora en Música y Danza y Máster en Artes Escénicas, es bailarina solista y coreógrafa. Es profesora de Historia de la Música en UNIR, ha dado clases en múltiples escuelas de España, Reino Unido y Japón, y bailado con varias compañías, entre ellas la de Joaquín Cortés.
Si es noticia hoy es porque su tesis doctoral ha merecido el Premio Extraordinario en la Universidad Rey Juan Carlos. El trabajo se llama Propuesta pedagógica de interacción música-danza para la formación del bailarín. Notación rítmica del zapateado flamenco. Este tipo de premios se otorga, como máximo, a una de cada cinco tesis calificadas con […]Si es noticia hoy es porque su tesis doctoral ha merecido el Premio Extraordinario en la Universidad Rey Juan Carlos. El trabajo se llama Propuesta pedagógica de interacción música-danza para la formación del bailarín. Notación rítmica del zapateado flamenco.
Este tipo de premios se otorga, como máximo, a una de cada cinco tesis calificadas con Sobresaliente cum Laude en un mismo Departamento.
En términos profanos, Rosa ha “traducido” al lenguaje musical tradicional el zapateado flamenco. O lo que es lo mismo, ha otorgado a cada sonido de este zapateado (tacón, planta entera, media planta, punta…) un símbolo para que se pueda escribir en una partitura convencional.
En el lenguaje musical occidental, cada instrumento de percusión tiene su símbolo. Eso es lo único específico que tiene que aprender un músico de percusión, porque el resto de símbolos es común a todos: corcheas, negras, blancas, etc.
De hecho, esos signos están normalizados en programas de edición de partituras (Sibelius, Finale, MuseScore, gratuito), que vienen a ser como “el Word de la música”. Los músicos componen actualmente usando estos editores, que además permiten escuchar lo que se va escribiendo y adelantar cómo sonaría.
Hasta la fecha no existía ninguno que pudiera incluir los sonidos que producen los pies de un bailaor flamenco. La primera intención de Rosa fue añadir a Sibelius, muy utilizado, los signos y el sonido del zapateado. “Es como añadir la ñ a un teclado”, bromea.
Como esa iniciativa no llegó a estandarizarse, De las Heras está desarrollando su propio software de edición de partituras para zapateado flamenco, en colaboración con un ingeniero informático.
Ella nos cuenta que “informatizar el zapateado flamenco es la aportación más original, no se había hecho hasta la fecha”.
Su tesis “tiene 1.180 páginas. En la primera parte se establece un estado de la cuestión del baile, se habla de cómo se ha enseñado. La forma de transmisión del baile flamenco ha sido fundamentalmente oral, aunque en Andalucía sí hay conservatorios y Universidades que enseñan flamenco, y en la Universidad de Sevilla hay un Doctorado en Flamenco”.
“En las otras 500 páginas hablo de didáctica y pedagogía del ritmo. Es un sistema que aúna música y danza a través de una propuesta didáctica”.
Está muy contenta con el premio, lógicamente, que espera que estabilice su carrera académica. Pero sobre todo porque “me alegra que es la primera o de las primeras que se premia sobre el flamenco en Madrid. Espero que repercuta en que el flamenco se instaure en las universidades fuera de Andalucía”.
