Sara Puerto
Cuarenta profesores de UNIR se reunieron en la primera de las jornadas que se ponen en marcha para fortalecer lazos entre el claustro docente y visibilizar los servicios que les ofrece la universidad.

¿Cómo se construye una universidad líder en línea? La respuesta está en sus personas. Por eso, la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) está llevando su compromiso al terreno, creando espacios de encuentro únicos para su claustro docente. El objetivo no es aproximar puntos en el mapa, sino encender la colaboración, la escucha y el sentimiento de pertenencia que impulsan la excelencia educativa.
El Vicerrectorado de Profesorado y Acción Cultural ha diseñado estas jornadas como una estrategia clave para humanizar la distancia, buscando activamente tejer una red sólida entre profesionales de todas las áreas del conocimiento. Es un esfuerzo continuo por demostrar que, detrás de cada aula virtual, hay una comunidad académica vibrante y comprometida.
La más reciente muestra de esta apuesta tuvo lugar en Valencia el pasado 23 de octubre: cuarenta docentes de la Comunidad Valenciana pudieron encontrarse y compartir sus experiencias personales y académicas, en una elección del entorno que no fue casual. El Vicerrectorado quiso retomar sus encuentros presenciales priorizando una región que recientemente ha enfrentado desafíos importantes.
“Queremos ir a donde viven y trabajan nuestros docentes de UNIR a lo largo de este curso y los venideros. Y teníamos el firme deseo de empezar por Valencia, tras las duras consecuencias y los daños provocados por la DANA el año pasado. Su acogida y cordialidad no nos ha sorprendido y nos anima a seguir propiciando estos momentos para (re)conocernos”, explicó la vicerrectora Teresa Santa María Fernández.
Acompañamiento a los profesores
La cita en Valencia fue el escenario ideal para generar un ambiente de intercambio y reflexión conjunta. Durante esta jornada se presentó la estructura organizativa que sustenta el trabajo docente en UNIR y los servicios de apoyo que la universidad pone a disposición de sus profesores, visibilizando el acompañamiento constante en su labor diaria.
Los profesores conocieron los servicios de apoyo que les ofrece UNIR.
UNIR sitúa al docente como la “pieza crucial e imprescindible para nuestra universidad“, remarca Santa María. Un compromiso que se traduce en el programa DOCENTIA, la Unidad de Apoyo a la Acreditación, los programas de formación continua, y, dentro del Plan de Desarrollo del Profesorado (PDP) que se publica cada año en el Espacio Académico, los diferentes servicios de apoyo en investigación y transferencia que se prestan desde los Vicerrectorados de Investigación y Transferencia respectivamente, o las becas para la obtención del Doctorado.
Los asistentes valoraron muy positivamente la claridad y cercanía de la exposición, aprovechando la oportunidad para dialogar con los responsables institucionales y resolver dudas.
Un momento especialmente inspirador del encuentro fue la presentación del proyecto de transferencia de María Luisa Díez Platas, docente de UNIR: el Museo Digital de Getafe.
Este proyecto, dirigido por Díez Platas y ejecutado por vecinos jubilados de la localidad madrileña, es un claro ejemplo de cómo la labor académica puede trascender las aulas y convertirse en un motor de transformación social. Además, ilustra el valor de la universidad y su vocación de servicio a la sociedad, poniendo de manifiesto el papel crucial que los docentes de UNIR desempeñan en la construcción de una universidad comprometida con su entorno.
Estos encuentros, que el Vicerrectorado extenderá a otras comunidades, evidencian que, más allá de la distancia física que implica la modalidad en línea, es posible construir comunidad, sintonizar en valores y avanzar hacia una educación de calidad, inclusiva y transformadora. Un paso más en el camino hacia una universidad más humana, cercana y comprometida.



