Claudia Rodríguez y Sergio Castaño
La decisión de la infanta Sofía de estudiar Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales ha puesto el foco en una carrera que gana en presencia en el plano profesional y crece en interés en un mundo global. Dos profesores explican las claves de estas titulaciones en UNIR y qué oportunidades ofrecen.

El anuncio de que la infanta Sofía estudiará el grado de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales ha devuelto estas disciplinas al primer plano de conversación. Confirmada por la Casa Real el 17 de julio de 2025, la elección de la infanta Sofía nos recuerda algo sencillo pero importante: entender cómo funcionan los gobiernos y qué lo que pasa en el mundo ya no es asunto solo de especialistas.
El estudio de la política y de la realidad internacional es una preparación esencial para cualquier persona, y aún más para quien, como miembro de la familia real, tendrá responsabilidades de representación que obligan a comprender el funcionamiento de las estructuras políticas y de las dinámicas globales.
Una brújula para un mundo complejo y en constante transformación
La Ciencia Política no es —ni ha sido nunca— una disciplina orientada únicamente a formar futuros cargos electos o para trabajar únicamente en la administración pública. Se trata, ante todo, de una caja de herramientas intelectual que permite analizar cómo se distribuye el poder, cómo se toman las decisiones colectivas y cómo se gestiona el conflicto en sociedades cada vez más diversas.
“La Ciencia Política es una caja de herramientas intelectual que permite analizar cómo se distribuye el poder, cómo se toman las decisiones colectivas y cómo se gestiona el conflicto en sociedades cada vez más diversas”.
Sus egresados dominan conceptos de teoría del Estado, economía política, administración pública, derecho, sociología, relaciones internacionales entre otros; al tiempo que adquieren competencias en análisis de datos, negociación y comunicación estratégica.
En un contexto marcado por la desinformación y la polarización, la formación politológica enseña a contrastar fuentes, evaluar la calidad de las políticas públicas y anticipar escenarios. Quien comprende el proceso de elaboración normativa o la lógica de los organismos internacionales y la lógica institucional nacional tiene, además, mayor capacidad para involucrarse activamente en la defensa de los derechos y en la mejora de los servicios públicos.
Hacia el entendimiento del contexto geopolítico y la gobernanza global
En un mundo globalizado, ningún país puede actuar de forma aislada sin tener en cuenta a los múltiples actores (Estados, grandes multinacionales, ONG, grupos de influencia) presentes en la escena internacional. Los recientes conflictos, como los de Ucrania y Oriente Medio, y los cambios políticos en diferentes países no pueden ser observados de modo distante, pues afectan de forma directa al conjunto de la comunidad internacional.
La realidad mundial ha demostrado que las decisiones nacionales tienen repercusiones planetarias. En 2025, ningún político —y, cabría añadir, ningún ciudadano informado— puede ignorar conceptos como “seguridad económica” o “soberanía digital” entre otros.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
El auge de la formación online de calidad: el caso UNIR
Mientras tanto, la universidad española ha experimentado en la última década una revolución metodológica sin precedentes. La Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) se ha consolidado como referente en educación digital con su Grado en Ciencias Políticas y Gestión Pública, un título de 240 ECTS, totalmente online, que combina clases en directo y en diferido, tutor personal y evaluación continua. Esta flexibilidad facilita compaginar estudios con trabajo o con oposiciones, y atrae tanto a jóvenes recién salidos del bachillerato como a profesionales que necesitan o quieren ampliar o reorientar su horizonte profesional.
Entre sus fortalezas destaca un claustro compuesto por académicos e invitados con experiencia de gobierno —por ejemplo, el exministro Jordi Sevilla, que participa habitualmente en seminarios sobre modernización administrativa— y un marcado enfoque en la digitalización del sector público.
El diseño curricular del grado de UNIR subraya la conexión entre teoría y práctica. En primer curso se imparten asignaturas como Introducción a la Ciencia Política, Teoría de la Constitución y Economía Política, fundamentales para entender los pilares del Estado moderno; se complementan con módulos de técnicas de investigación y análisis cuantitativo, requisito indispensable en la era del big data. A medida que avanzan en las asignaturas, el alumno se adentra en políticas públicas sectoriales, sistemas electorales comparados, marketing político y gestión de proyectos, con especial atención a la evaluación de impacto y la rendición de cuentas.
Quienes concluyen el Grado en Ciencias Políticas y Gestión Pública en UNIR, no solo manejan marcos analíticos; aprenden también a deliberar, a detectar sesgos y a gestionar la complejidad. Un politólogo formado sabe traducir datos demográficos en propuestas de política social, explicar a la opinión pública por qué una ley requiere mayoría cualificada o diseñar indicadores para medir la eficacia de un plan de sostenibilidad.
Estas destrezas son esenciales para ocupar puestos en la Administración General del Estado, los gobiernos autonómicos, los parlamentos o los organismos reguladores. Pero también resultan valiosas en empresas que operan en entornos regulados —energía, telecomunicaciones, sanidad— y en entidades del tercer sector que inciden en la agenda pública.
Para la generación de la infanta Sofía —y para cualquiera que aspire a influir en el debate público— la mirada internacional ya no es un complemento, sino parte del núcleo formativo. Frente a la tentación de pensar la política en clave exclusivamente doméstica, la doble vertiente política–internacional amplía el campo profesional hacia la diplomacia, la cooperación y la gobernanza supranacional.
“Para la generación de la infanta Sofía, y para cualquiera que aspire a influir en el debate público, la mirada internacional ya no es un complemento, sino parte del núcleo formativo”.
Para ello el Grado en Relaciones Internacionales de la UNIR aporta una formación sólida, crítica y multidisciplinar que permite comprender de forma amplia, y desde diferentes enfoques la realidad del mundo actual. El egresado del grado en Relaciones Internacionales será capaz de analizar conflictos, liderar procesos de cooperación, interpretar tratados y participar en la toma de decisiones de instituciones públicas y privadas a nivel global.
Las oportunidades profesionales que abre este grado son infinitas, el graduado en Relaciones Internacionales podrá trabajar en el servicio diplomático de su país, en organizaciones internacionales, en grandes corporaciones, participar en proyectos de cooperación, ONG, ser analista para centros de investigación o medios de comunicación, así como optar por la carrera académica, o trabajar en el ámbito de la seguridad internacional.
Que la infanta Sofía decida dedicar sus años universitarios a la ciencia política y las relaciones internacionales es un gesto que interpela a toda la sociedad. Su trayectoria académica, señala que la formación rigurosa y cosmopolita no es un lujo, sino un deber para quienes aspiren a entender y mejorar las instituciones.
Sin embargo, la posibilidad de adquirir esas competencias no debería quedar restringida a élites. Plataformas educativas como UNIR democratizan el conocimiento con acceso a estudios de alto nivel, sin importar la ubicación geográfica o la situación laboral del alumno.
En este marco, estudiar Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales, es entrenar la mirada para tener un enfoque analítico y es, sobre todo, prepararse para colocar el Estado al servicio de la ciudadanía, con empatía y rigor técnico. La noticia de la infanta Sofía constituye un recordatorio simbólico de esa exigencia; la existencia de grados como el de la UNIR ofrece los medios concretos para que cualquier persona, desde su propio proyecto vital, ponga sus conocimientos al servicio de construir una sociedad mejor.
(*) Claudia Rodríguez es coordinadora académica del Grado en Ciencias Políticas y Gestión Pública de UNIR. Ha sido consultora de ONUMUJERES, PNUD y la Organización Iberoamérica de la Seguridad Social. Su interés investigador se centra en el análisis de las políticas públicas, la planificación del desarrollo y los procesos de integración y desarrollo social.
(*) Sergio Castaño es coordinador del Grado en Relaciones Internacionales de UNIR. Doctor en Integración Europea por la Universidad de Valladolid (Premio Extraordinario). A lo largo de su carrera ha participado en diferentes grupos de investigación internacionales en Bélgica, Italia, Portugal y Emiratos Árabes.
Referencias:
- Garrocho, D. S. (2025, 21 de julio). Universidad para princesas. El País.
- Marulanda Gaitán, A. (2025, 15 de enero). ¿Por qué estudiar Ciencia Política y cuál es su importancia para el futuro? Universidad Autónoma de Manizales.
- RTVE.es/Agencias. (2025, 17 de julio). La infanta Sofía estudiará Política y Relaciones Internacionales en el Forward College. RTVE.
- Universidad Internacional de La Rioja. (2025). Grado en Ciencias Políticas y Gestión Pública [Sitio web].
- Facultad de Derecho