Sara Puerto
El Programa Executive en Chief Happiness Officer (CHO) de UNIR proporcionará las claves de esta certificación, que permite a los directivos mejorar el bienestar de los empleados, así como la productividad y competitividad de sus organizaciones.
La Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) ha firmado un acuerdo con TÜV Rheinland por el que incorpora al Programa Executive en Chief Happines Officer (CHO) la certificación ‘Sello TÜV Rheinland de Empresa Saludable’.
Los alumnos de esta titulación de UNIR aprenderán cómo obtener este sello, cada vez más relevante en el mundo de la empresa, por los beneficios que presenta.
“El bienestar corporativo y la gestión de la felicidad ha dejado de ser una tendencia para convertirse en una necesidad inexcusable. Las nuevas generaciones demandan esta forma de liderazgo basado en el ser humano, que respete unos valores de plenitud personal y sostenibilidad acordes con los tiempos”, explica Andrés Pascual, director del Programa Executive en Chief Happiness Officer (CHO) de UNIR.
“Por ello, no solo aquellos que tengan un rol específico de CHO, sino todo directivo o responsable de un departamento, ha de integrar con urgencia las diez habilidades del Líder del Bienestar para no quedarse atrás -añade-. Y dentro de estas habilidades está el obtener los diferentes certificados de empresa saludable para la organización”,
Javier Crespo, responsable del área de Salud de TÜV, proporcionará a los alumnos de la titulación las principales claves para obtener el ‘Sello TÜV Rheinland de Empresa Saludable’. “Para quienes no lo conozcan, será la primera vez que tengan un primer acercamiento al mundo de la certificación: en qué consiste, qué elementos se tratan en una auditoría, qué suele solicitar el auditor, entre otros factores. De esta forma, si deciden certificar el modelo de empresa saludable, tendrán el conocimiento de qué pasos hay que seguir”, indica.
Modelo de empresa saludable
El modelo de empresa saludable, como refiere Crespo, “aporta muchos beneficios, como disponer de trabajadores sanos, motivados y satisfechos, trabajadores tendrán un mayor compromiso con la empresa; favorece la retención de talento; mejora el clima laboral; y la empresa se convierte en más atractiva para la captación de nuevos talentos, entre otros”.
Para Pascual, “el impacto y los beneficios de implantar cualquier plan de bienestar corporativo y felicidad organizacional son enormes. Por ello esta demanda de perfiles y competencias crece a medida que las empresas aumentan su grado de conciencia, viendo que los números son inapelables: un 41% menos de absentismo y un 55% menos de rotación de personal; un impulso exponencial de la creatividad y la productividad y caída del estrés…”.
Son datos de la consultora Gallup. Así, “un empleado feliz supone muchos más beneficios y menos costes. El retorno de la inversión (ROI) es de 2,54 euros por cada euro invertido en programas de bienestar, según la experiencia acreditada de empresas como las que participan en el programa a través de sus CEOs y directivos de primer nivel”, añade el director de la titulación de UNIR.
Invertir en bienestar
El Programa Executive en Chief Happiness Officer (CHO) de UNIR está dirigido a personas que lideran o quieren asumir el rol de CHO dentro de la organización, además de consultores externos que diseñan estrategias de bienestar. “Invertir en bienestar en una empresa no es poner un cesto de fruta a disposición de los empleados o pufs de colores por los pasillos. Es crear una estrategia que tiene al ser humano en el centro, como reclaman las nuevas generaciones y los tiempos que nos toca vivir”, afirma Pascual.
La titulación proporciona los conocimientos para diseñar una estrategia de bienestar. “Lo primero y más importante, para la implementación de este o cualquier otro tipo de esquema (sistemas de calidad, medio ambiente, prevención de riesgos), es la implicación directa de la dirección, que debe dotar de recursos para el desarrollo de las estrategias, en este caso de bienestar”, comenta Crespo, que impartirá esta materia en la formación.
Este experto considera que es “interesante reflejar estas líneas de bienestar en la misión y visión de la empresa o crear una política de bienestar. A partir de este momento se debe realizar un estudio de la situación actual de la empresa (diagnóstico), establecer un plan de acción, teniendo en cuenta la situación de empresa, un plan de seguimiento y evaluación de resultados y por último e importante establecer un sistema de comunicación interna para notificar a todos los trabajadores qué se está realizando para promover su estado de salud”.
Tres dimensiones y niveles
El Programa aborda el bienestar “desde tres dimensiones: física, emocional y social; y así mismo desde tres niveles: individuo, equipo y organización, siempre con el trabajador en el centro. Como estos son a su vez los fundamentos de la certificación de empresa saludable de TÜV, podemos decir que compartimos los mismos principios y el mismo propósito”, precisa Pascual.
“También estamos alineados en la vigilancia constante, con posterioridad a la implantación de las estrategias de bienestar. Del mismo modo que TÜV vigila la medición y evaluación sistemática de los factores esenciales, en el Programa Chief Happiness Officer hemos creado nuestras propias herramientas de medición, como son el HappyMeter y el HappyTest”, concluye el docente de UNIR.
