Rafael Puyol, presidente de UNIR, ha participado en el evento ‘Potenciando el talento’, organizado por Europa Press e inaugurado por la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, junto al secretario general de Universidades, Francisco García Pascual.

Madrid, 1 de octubre de 2025.-
La Educación Superior cumple un papel esencial en el desarrollo territorial, social y económico de las sociedades, y su influencia será mayor en los próximos años gracias a la inteligencia artificial y la transformación digital.
Es una de las conclusiones más destacadas del evento ‘Potenciando el talento’, organizado por Europa Press en Madrid e inaugurado por la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant. También ha participado el secretario general de Universidades, Francisco García Pascual, junto a destacados representantes del ámbito universitario, entre ellos Rafael Puyol, presidente de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR) y rector honorífico de la Universidad Complutense.
En su intervención, la ministra Morant anunció que el Consejo de Ministros aprobará el próximo martes el real decreto sobre calidad de las Universidades. Además, destacó que el Gobierno ha destinado cerca de mil millones de euros en diferentes convocatorias para financiar proyectos de investigación y atraer talento científico. “Nuestro Sistema Nacional de Ciencia suma talento con más y mejores convocatorias”. Morant puso como ejemplo el programa ‘Atrae’ para “reclutar a la élite investigadora mundial”, que ha permitido captar a 58 líderes mundiales en áreas de investigación de alto impacto, procedentes de más de 30 países.
En cuanto a los resultados en empleo, la ministra afirmó que “hay más investigadores trabajando hoy en España, un 25% más que en 2018”. Además, destacó que el CSIC cuenta con un máximo histórico de 16.148 trabajadores. “El empleo científico y técnico es el que más crece en el país”.
Estos datos se reflejan en el cómputo global: “El personal investigador en España alcanzó las 175.044 personas, lo que representa un aumento del 8,2% respecto a 2022. Estas personas, con su talento, son quienes garantizan la mejora de la sociedad y el progreso de todos”, señaló.
Finalmente, la ministra enfatizó el papel clave de la universidad, que “vive un momento decisivo” con 1.800.000 estudiantes universitarios. En este ámbito, se refirió al programa “histórico” María Goyri, que destina “más de 900 millones de euros a financiar las plazas de profesores contratados doctores” en las universidades públicas.
La Educación Superior como palanca de desarrollo
Durante la primera mesa redonda del acto y en declaraciones posteriores al mismo, Rafael Puyol ha subrayado que la Educación Superior es el intangible que marca la diferencia entre territorios y sociedades. “Las regiones que han apostado por universidades de excelencia, como Boston, California, Londres o China, han experimentado un desarrollo económico y social muy superior al de aquellas que no han invertido en educación superior”, ha afirmado.
Esto contrasta con la situación de otros países, que “teniendo grandes recursos naturales salen de la pobreza extrema pero que no logran un desarrollo suficiente precisamente porque carecen de un sistema universitario de calidad.
IA y universidad: retos y oportunidades
Entre las ventajas de la Inteligencia Artificial en la docencia, el presidente de UNIR ha mencionado el aprendizaje adaptativo, la pedagogía aumentada, las tutorías inteligentes y el uso de modelos de lenguaje como ChatGPT, Gemini o E-Tutor, que facilitan la comprensión de las materias y la personalización del aprendizaje.
No obstante, Puyol ha advertido de los riesgos asociados a la IA, como los sesgos en los algoritmos, el aumento de las desigualdades educativas por la brecha digital, la gestión ética de los datos y la posible pérdida de creatividad humana. “El éxito de la IA en la educación dependerá de una integración ética y equilibrada que complemente, y no sustituya, las capacidades humanas fundamentales como la creatividad, la empatía y el pensamiento crítico”.
En el ámbito de la investigación, la IA ofrece posibilidades infinitas: análisis de grandes volúmenes de datos, creación de modelos y simulaciones, automatización de tareas repetitivas y colaboración interdisciplinaria, con avances notables en campos como la medicina, la meteorología, la astronomía o la genética. Sin embargo, ha insistido en la necesidad de una mayor colaboración entre universidades y empresas tecnológicas para superar barreras económicas y de capacitación docente.
“La universidad que no sepa utilizar la IA, se va a quedar rezagada”, sentenció.
Enseñanza híbrida y nueva presencialidad: hacia un modelo flexible y dinámico
Debemos tener en cuenta, según Puyol, que “ha cambiado el perfil de los estudiantes”, y apostó por un sistema híbrido que combine lo mejor de la enseñanza presencial y la enseñanza virtual, con una “nueva presencialidad que evite el absentismo de tantos alumnos que dejan ir a clase”.
“La formación presencial es fundamental para los estudiantes más jóvenes y para titulaciones con alta carga práctica, mientras que la enseñanza virtual es clave para quienes tienen compromisos laborales o familiares o residen lejos de los centros universitarios. La combinación de ambas modalidades, con lo mejor de cada una, es la fórmula educativa más eficaz”, ha argumentado el presidente de UNIR.
Ha puesto como ejemplo el modelo de universidades como el TEC de Monterrey, Charles Sturt University (Australia), Tomorrow University (Alemania) o Southern New Hampshire University, que han apostado por la flexibilidad y la personalización del aprendizaje. “El modelo híbrido permite un aprendizaje flexible y dinámico, facilitando la conciliación de la formación con otras tareas y promoviendo la autonomía del estudiante”, ha añadido.
Formación en competencias: acelerador de la empleabilidad
La empleabilidad, ha afirmado Puyol, sigue siendo la asignatura pendiente de la universidad española. “Seis de cada diez universitarios no se sienten preparados para el mundo laboral al acabar la universidad, y casi un 30% cambiaría su carrera por un módulo de FP si pudiera volver a elegir”, ha destacado, citando datos de la Fundación Universidad-Empresa.
Para cubrir la brecha entre la universidad y el mundo laboral, ha defendido la necesidad de apostar por la formación en competencias transversales y la actualización permanente de los planes de estudio. “Las empresas valoran cada vez más el trabajo en equipo, la adaptabilidad, la experiencia y el liderazgo ético, por encima de los conocimientos puramente teóricos”, como hacen universidades como Nexford University (EE.UU.), que ha diseñado su plan de estudios en torno a las competencias demandadas por empresas líderes como Microsoft, IBM, Unilever o Deloitte.
“La universidad debe ser un acelerador de la empleabilidad, ofreciendo prácticas, actividades y experiencias que preparen a los estudiantes para los retos del mercado laboral”, ha concluido.
En línea con la tendencia internacional, ha destacado la importancia de orientar la enseñanza hacia la resolución de problemas reales y complejos, siguiendo modelos como el de la London Interdisciplinary School (LIS) o la African Leadership University (ALU). “La LIS ofrece un aprendizaje basado en el estudio de problemas complejos mediante una enseñanza interdisciplinar, combinando trabajo asíncrono, clases sincrónicas, tutorías y coaching personalizado”, ha explicado.
El tamaño sí importa: alianzas universitarias para mejorar calidad y alcance
Finalmente, Puyol ha enfatizado la necesidad de apostar por las alianzas interuniversitarias como vía para multiplicar el impacto y la calidad de la educación superior. “Las universidades más pequeñas, por sí solas, no disponen de los recursos humanos, tecnológicos ni de la capacidad investigadora suficiente para afrontar los retos actuales, especialmente en materia de digitalización e inteligencia artificial”, ha señalado.
Ha puesto como ejemplo el modelo del Singapore Institute of Management, con 13 universidades asociadas, y ha reclamado una mayor colaboración interuniversitaria en España, tanto en docencia como en investigación y transferencia de conocimiento. “El tamaño se convierte en un factor crítico para la eficacia y la visibilidad internacional de las universidades. Las alianzas y, en algunos casos, las fusiones, pueden contribuir a ofrecer una enseñanza de mayor calidad y a desarrollar proyectos conjuntos de investigación con mayor alcance”, ha concluido.
SOBRE UNIR:
UNIR es una universidad que ofrece una educación superior de calidad a través de las tecnologías más innovadoras, siempre con el estudiante en el centro de su actividad. En España, imparte 55 grados, 155 másteres oficiales, 83 títulos propios y 4 programas de doctorado que tienen como objetivo acercar una educación integral y personalizada a los más de 90.000 estudiantes que trabajan en sus aulas presenciales-virtuales desde un centenar de naciones, principalmente en España e Hispanoamérica. Su método de enseñanza, adecuado a las demandas del mercado laboral, hace de UNIR una auténtica palanca social que rompe barreras y ayuda a que cada uno, esté donde esté, cumpla sus sueños de formación y de progreso personal y profesional. UNIR pertenece al grupo educativo Proeduca, que, junto a otros centros de enseñanza superior y no reglada, atiende a más de 105.000 estudiantes.