Ayudar a hoteles a generar más beneficios y asesorar a inversores que quieran entrar en este sector son las dos principales funciones de un consultor hotelero.
Después de la crisis sufrida por gran parte de los establecimientos hoteleros a consecuencia de la pandemia mundial por COVID-19, el consultor hotelero se ha erigido como el experto imprescindible que llega para dar un nuevo enfoque al hotel, ayudándolo a potenciar cuestiones como la organización, el marketing o la coordinación de equipos, aspectos que influyen en su rentabilidad.
La última investigación anual del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés), muestra que en 2021 se recuperaron 18,2 millones de puestos de trabajo de los 62 millones perdidos durante la pandemia, lo que supone un aumento del 6,7 % interanual. Se trata de un sector en plena reinvención y en el que actualmente encuentran cabida gran variedad de profesionales.
Los hoteles que suelen requerir de los servicios de un consultor hotelero son, o bien, los que van a abrir sus puertas próximamente, o bien, aquellos que quieren mejorar sus resultados, a pesar de llevar tiempo en el mercado.
Funciones del consultor hotelero
La figura del consultor hotelero se ha vuelto imprescindible para muchos establecimientos. Algunas de las funciones que un consultor hotelero puede desempeñar pasan por:
Captar más clientes
Este es el principal objetivo de una empresa que decide contratar a un consultor hotelero y, por lo tanto, este experto se ocupará de implantar las estrategias que considere necesarias para conseguir atraer más huéspedes. También entra dentro de este cometido retener a los clientes actuales del hotel.
Hacer más rentable el negocio
Una de las primeras labores del consultor hotelero será realizar un estudio financiero del negocio para poder detectar dónde es posible obtener mayor beneficio económico. Este informe debe incluir aspectos como la gestión de pagos, los costes de mantenimiento, el precio actual que se cobra por los servicios, el pago de impuestos o la contratación de personal.
Reforzar el posicionamiento en internet
Actualmente, la inmensa mayoría de búsquedas de hoteles se hacen a través de internet y esto es algo que deben tener muy en cuenta los establecimientos hoteleros. Por este motivo, una de las tareas fundamentales del consultor hotelero es optimizar el posicionamiento SEO para lograr que el hotel mejore su visibilidad en los resultados orgánicos de los diferentes buscadores.
Elevar la reputación
Desde el momento en el que se decide invertir en mejorar la calidad de los servicios que presta el hotel, aumenta la confianza de los clientes e, inevitablemente, se incrementa la reputación del establecimiento.
Mejorar la gestión del tiempo
En todas las empresas y, por lo tanto, también en los hoteles, existen tareas que pueden hacerse de manera más eficiente. Un gestor hotelero sabrá identificar esos procesos en los que los trabajadores emplean demasiado tiempo, proponiendo alternativas más eficaces para ganar productividad.
Adaptar el negocio a las demandas del mercado
Este profesional debe ir un paso por delante de las tendencias que funcionan en el mercado para aconsejar a los responsables del establecimiento hotelero sobre cómo aplicarlas a su negocio de la mejor manera.
Implementar la tecnología más adecuada
Contar con el software adecuado es fundamental para un negocio hotelero, ya que los trámites deben realizarse de la forma más rápida y efectiva, sin hacer perder tiempo innecesario a los huéspedes. Elegir la tecnología que mejor se adapte a las necesidades del establecimiento en cuestión es una de las tareas más relevantes del consultor hotelero.
A la hora de contratar los servicios de un consultor hotelero se valora, además de la experiencia, la formación académica del profesional. En este sentido, el Máster en Revenue Management de UNIR ofrece las enseñanzas necesarias para ejercer como consultor hotelero, ya que en su plan de estudios se contempla formación en áreas como el e-commerce, el marketing digital, las herramientas Beonprice o el revenue management aplicado a turismo, ocio, retail y negocios con venta online.
